domingo, 5 de junio de 2011

¿Extrañas? Mira, pequeña, no existe necesidad; sabes bien que a ti dices cada palabra, verso, criatura.

sábado, 28 de mayo de 2011

...Ojalá el tiempo fuese igual de corto cual los sueños...

Hambre, sueño. Deseo dejar palabras para así ubicar mi rostro parlante ante ellas; no huir más, renuente, al momento de la máscara caída -simple, bello- y dejar de lado conjuntos de letras comunmente míos en mi desubique. Creo haber logrado nada. Comeré, dormiré.

miércoles, 18 de mayo de 2011

Sabes.

Creada inspiración, el deseo de cada figura tuya sucumbe la mía.
Hace tiempo ya no transmitía demasiado.
El humo renace y fluye contrario a su mirada; eterna sería la confusión a su inexistencia.
Caen suministros de vaivenes; ya no imagino más olvidos. Fijo su esencia, y bien sé hasta dónde llegaré a repetirla. Giro, humedezco cada palabra de sabor.
No sería suficiente la confusión del humo renaciente.
Vayamos lejos, sin nada en mente; oscurecerá y sucederá la Luna al cielo -pero claro, esto tú lo sabes bien-.
Vayamos cerca, temiendo al día en que la solaz virtud desaparezca.
Ya fijé, ¿has fijado? mira, siempre habrá tiempos de zozobra -mas aún, esto tú lo sabes bien-.

domingo, 15 de mayo de 2011

El agua parece mar...


Imagino la simpleza de ubicar mi cuerpo en flor. La olfateo, la sumergo y contrae sistema a sistema aquí ahora. Ubico la imagen del contexto contrariado, la comparo con la risa y suspendo su secuencia. Rien los ni
ños en las calles, sus padres juegan a esconderse creando vidas aparte, en silencio. Yo juego, observo sus risas, las encuentro en absoluto vacías, en absoluto solitarias. Juegan, rien juntas




siempre.

sábado, 23 de abril de 2011

Suspira, besa.

Si has de irte,
vete.
Vete,
vete sin vuelta.
Ve.
 
...Busca,
envuelve,
suspira,
besa,
siente...
Ve,
demuestra ya
el deseo inédito.
Ve, vete.

sábado, 16 de abril de 2011

Ya muero.
Vengo, respiro balbuceo un tanto.
No más.

Creo sentir,
creo mirar simplicidades
absurdas.
Ya muero.
Nada irrevocable me sucede, la variedad de sucesos sin sentido propio absorbe fibras etéreas, cual, facilmente, inundan la memoria.
Ya no viene a más. Aquí, nada permanece.

Ya muero.

martes, 29 de marzo de 2011

Me haces.

-dos lágrimas, una pérdida entre tantas. Mi contrariedad apuesta silencio de mirada, sonido, espacios.
Te has ido, aquella pequeña porción de agua escapa, siendo capaz su huida de lo existente aquí dentro; ya ni sé qué vive y ha muerto, absurda y solaz soledad me has propiciado.

Te vivo, a ratos, en sueños -te encuentras lejos,
sucumbe precoz perdón; beso, extraño, vuelo-. 


Me haces. Falta que me haces cual aves muertas al mar; secretamente adoradas -yacientes sin vida suya en él-.

viernes, 18 de marzo de 2011

Mejor perdure el silencio.

Perder importancia al asunto, persona, suceso.
Vagar, merodear, no cesar.
Sucumbir al aliento
humo cual mece silencio vacío.
Observar mediocridad, asumirla, vivirla.
Sin exceso de voz
repetirla.

Contrariedad a falta suya,
mía.
Repletas ideas del no sé qué
no existe, varía.
Desubicar variables, risas.
Minimiza, minimiza, atrapa. Repetido vacío.
Palabras difuminadas,
mejor perdure, silencio.
Palabras con falta,
faltan,
                   faltan.

sábado, 12 de marzo de 2011

Esa tranquilidad que evoca dentro mío cuando tengo tu mirada, tu beso, es irremediable.
Crece y siente balbuceos de incertidumbre, concluye dentro suyo,  vuela.

sábado, 29 de enero de 2011

Todo un.

ubicar una sonrisa tuya
           reir con ella.

lunes, 24 de enero de 2011

Continuo.

Primeramente, creer la vida en nada; ubicar los momentos cual unísonos sean, observarlos detenida, perspicazmente. Libre el ser a estar, divaga resultante de conjunto a palabras como único fruto; fervientemente ubicando, girando ideas. O, clara el agua -envase del cual persisten memorias.
Pesadumbre, conjunciones precoces a no decir nada cual tanto es dicho, produce intentos magistrales de lumbre convertida en vivencias sin par ni equívoco, cual es momento mismo.
Morales, ideas de miel, emblemas.

Entonces continuo, tu estar conmueve en ella su estar diluido -sofoque cual diluida proeza indicas en mi-, tus maneras no las sé, nunca las he conocido; envuelves cada sentido en uno, infinito.
Te miro,
recuerdo estar.                                    

domingo, 23 de enero de 2011

Estable

Qué bien no haberte olvidado cuando tuve opción. Divagaba ella en el absurdo, en la agonía; fluía constante, fugaz e inconclusa. Percance mío dejé tu fluir a la par, fugaz también, inconcluso. Te perdí a segundos referente a años que eran; te ubiqué luego de contrariedad de tiempos y sonreímos juntos, tal vez. Intercambio de mente era entonces, mirando tu recuerdo en voz viva, presente. Tú, cómodo. Yo, en absoluto.
Fingir contrariedad, buscar con los ojos siempre: la mirada recuerda entonces.
Siempre siendo tú el más bello.